Yo os
conjuro, oh doncellas de Jerusalén,
Por los
corzos y por las ciervas del campo,
Que no
despertéis ni hagáis velar al amor,
Hasta que
quiera. (Cantares 2:7)
Te quiero
porque te quiero a ti,
Y siempre te
querré,
Porque es mi
destino quererte
Pero lo que
quiero es que te quieras a ti,
Y que sueñes,
y que
tus sueños realices.
Escucha y
despierta,
el mundo es
de los que lo piensan
Y los
que lo sueñan.
Aunque mucho repetí,
Aunque mucho repetí,
no
despertéis a mi gacelílla
hasta que
ella quiera,
es hora de
escuchar
la voz
silenciosa
que desde tu
interior insiste,
¡¡Despierta!!
¡¡Despierta!!
tu aurora ha
llegado,
entona tu
canción vespertina,
la que tus
sueños recuerda,
y empieza a
realizarlos.
Alfredo Manzano.
Alfredo Manzano.